La Increible Parida de Narutero 64 - Nueva Era

Hola, amigos. Tras ver que la serie no avanzaba nada y que su argumento era mas simple que el mecanismo de una palanca (que se lo digan a Gordon Freeman), os dejo el prologo de lo que sera, en Septiembre y con ayuda de unos colegas, la nueva serie.

Disfrutad ^^



YouTube City - 6:00 AM

Amanece.

Otro día en esta enorme metrópolis, con todos y cada uno de sus habitantes preparados para llevar a cabo sus tareas. Otro día en el que todo parece aburrido: ir al trabajo, 3 horas de oficina, media hora de descanso, otras 3 horas, vuelta a casa… pero hoy no. Hoy es viernes, día que anuncia 2 días de ocio sin precedentes. Y, como es habitual, el bar de Xemnas, el “The Abogado´s Club”, esta hasta arriba de gente que baila, ríe, discute animadamente y comenta todo lo que le ha pasado, siempre con una cerveza y una sonrisa.

El “Abogado´s Club” era el mejor bar de la ciudad, o de esta parte de la ciudad, al menos. Se cuenta que en los demás barrios de la ciudad (YT City estaba dividida en muchos barrios) había mas barrios, pero todo el mundo decía que el bar de Xemnas era el mejor. Y la clientela lo demostraba, celebrando cada pequeño evento que rompía la, ya de por si, divertida monotonía del local. Todavía se recordaba el día que Lenin volvió con ellos, tras su periplo buscando la paz o como se vivió el primer aniversario de Zero y Katsura como pareja formal, pero aun era recordada por todos y cada uno de los habituales parroquianos la fiesta que organizo Zorc con motivo de su cumpleaños. Aquella fiesta se desmadro, debido al ingente consumo de alcohol, pero todo quedo entre amigos…

Y es en el “Abogado´s Club” donde comienza esta historia, como todas las que se cuentan en un día aburrido, lluvioso o los pocos que cierra Xemnas por inventario (la mayoría de las veces por falta de suministros). Todo comenzó en uno de esos perezosos y calientes días de verano…

- Otro magnifico día en esta magnifica ciudad – dijo Narutero, mirando por la ventana – Y lo mejor de todo, hoy es viernes – esbozó una sonrisa – Hoy toca marcha

Abrió el armario, mientras tarareaba una canción lenta y alegre. Tomo su sombrero de ala corta, regalo de su camarada Lenin, se vistió con un esmoquin negro y una corbata roja, tomó sus gafas de sol y salió por la puerta, listo para enfrentarse a ese enemigo que todos tenemos: la oficina.